Mostrando entradas con la etiqueta COPENHAGUE. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta COPENHAGUE. Mostrar todas las entradas

miércoles, 9 de enero de 2013

ROSKILDE

Dejamos hoy la última entrada dedicada a la escapada que realizamos durante el pasado mes de julio a Dinamarca y Suecia. En concreto, nos centraremos en la ciudad danesa de Roskilde, una ciudad que no estaba inicialmente incluida en nuestro viaje y que nos sorprendió muy gratamente.


Roskilde está situada en la isla de Selandia y cuenta en la actualidad con cerca de 50.000 habitantes. Sin embargo, no esperes encontrar edificios altos y grandes aglomeraciones. Allí todo son casitas y prados que desembocan en el bonito fiordo de Roskilde.



Por su cercanía con Copenhague, Roskilde es un destino perfecto para realizar pequeñas excursiones. Sólo por pasear por su casco histórico o visitar el puerto y su famoso museo de barcos vikingos ya merece la pena acercarse hasta allí.


Eso sí, no olvides hacer una parada en su catedral, de estilo gótico danés y declarada Patrimonio de la Humanidad desde 1995. Cuanto menos, curiosa.



En fin, me calló ya y os dejo algunas fotos y vídeos. 



lunes, 19 de noviembre de 2012

MALMÖ

Muchos (y, por lo general, no muy agradables) son los factores que están demorando en exceso las diferentes entradas de mi viaje a Dinamarca y Suecia de este verano. Pese a todo, y aprovechando que hoy tengo unos minutos libres (1), me gustaría compartir con los caminantes de este páramo algunas fotografías y vídeos del mismo. En concreto de Malmö, ciudad sueca situada en el sur de la península escandinava. 


Con cerca de 300.000 habitantes, Malmö es la tercera ciudad más grande de Suecia, tras Estocolmo y Gotemburgo. A pesar de su aspecto moderno e industrial, tiene un centro histórico bastante bonito. Por eso, si andas por Copenhague no deberías perdértela. No olvides que desde el año 2000 Malmö está comunicada con la capital danesa por el puente de Oresund, lo que la deja casi a tiro de piedra. 

En fin, ahí van las fotos y los vídeos.












NOTAS:
  1. “Libres” significa tener a mi enano en brazos y la pantalla del portátil dividida en dos, de manera que mientras él ve en su mitad un vídeo de “Estaba el señor don Gato” yo tecleo con dos dedos estas paridas en la otra mitad.


domingo, 14 de octubre de 2012

COPENHAGUE 02: OCHO PARADAS Y UN SMØRREBRØD



Completamos hoy el paseo que, unas entradas atrás, emprendimos por la increíble capital danesa. Estos son los lugares en el mapa. ¿Te apuntas? 


01. VOR FRELSERS KIRKE. Esta espectacular iglesia está situada en Christianshavn y es famosa por su cúpula, a la cual se asciende por una escalera que, a diferencia del resto de iglesias, está situada en el exterior del edificio. 


No es una subida apta para todo el mundo, pero si tu vértigo no es excesivo las vistas de Copenhague son magníficas desde allí arriba.


02. CHRISTIANIA. Es una ciudad libre (situada también en Christianshavn) que tiene la extensión de unos treinta campos de fútbol. En su interior alberga multitud de tiendecillas y locales para comer. 


Sus escasos ochocientos habitantes no se sienten miembros de la Unión Europea, y eso es algo que aprecias cuando abandonas esta comunidad independiente.


03. THE BLACK DIAMOND. No todo en Copenhague son edificios centenarios. También hay magníficos ejemplos de la arquitectura más moderna. Un ejemplo es el “Diamante Negro”, de Schmidt, Hammer y Lassen. Está situado en el canal de Christianshavn y, si mis apuntes no fallan, acoge parte de la Biblioteca Real de Dinamarca.


04. NYHAVN. Una de las calles laterales de la impresionante Kongens Nytorv da acceso a este puerto de postal (aunque, la verdad, decepciona un poco por culpa de la exagerada aglomeración de restaurantes y turistas). 



Eso sí, es el lugar idóneo para comprobar de primera mano el civismo y el carácter nórdico. Cómo si no puedes explicar que uno deje aparcado durante más de una hora, en mitad de la calle, un carrito de niño repleto de bolsas y que a la vuelta, tras haber recorrido en uno de esos barquitos turísticos medio Copenhague, todo siga en su sitio. 


ALMUERZO. Si tienes hambre y estás en Copenhague, una opción muy recomendable es probar un Smørrebrød de arenques o salmón. Las combinaciones son casi infinitas y todas están exquisitas. Dejo algunas sugerencias que a mí me encantaron. 




05. AMALIENBORG.Este bello palacio es la residencia de la familia real danesa, y está compuesto por cuatro edificios que forman una bonita plaza central. Una auténtica chulada en el centro de la ciudad que (salvando las distancias) recuerda un poco a la Plaza de San Pedro, en el Vaticano.




06. FREDERIKS KIRKE. Situada junto a Amalienborg, es conocida como la iglesia de mármol (aunque, básicamente, es sólo una inmensa cúpula, creo que la mayor de Escandinavia). Al igual que varios de los principales monumentos de la capital danesa, actualmente está en obras.


07. CASTILLO DE ROSEMBORG. Dicen que en el pasado fue casa de campo y residencia de los reyes, pero en la actualidad es utilizado como museo y, entre otras cosas, alberga las joyas de la corona danesa. Esta rodeado de un parque precioso.


08. RUNDETAARN. Esta torre redonda se empezó a construir en 1637 y desde entonces ha sido utilizada como observatorio astronómico. De hecho, es el observatorio astronómico más antiguo de Europa, y durante los meses de invierno cualquier aficionado a las estrellas puede disfrutar del cielo nocturno de Copenhague gracias a su excelente telescopio.


domingo, 9 de septiembre de 2012

COPENHAGUE 01



Copenhague es la ciudad perfecta para ver durante uno de esos puentes que hasta ahora teníamos muchos españoles. Tú te dejas caer por allí un jueves por la tarde y, en apenas un par de días, tienes tiempo más que de sobra para recorrerla (por tener, tendrás hasta la oportunidad de cruzar una mañana el estrecho de Oresund y acercarte hasta las ciudades suecas de Malmö y Lund). Con esto no quiero decir que Copenhague se vea rápido o que no tenga excesivo interés. Sigue leyendo y comprobarás por qué.

Para abrir boca te propongo un sencillo recorrido que cruza el centro de la ciudad de sur a norte. En concreto, desde la Estación Central hasta La Sirenita (The Little Mermaid). En línea recta, apenas 3 kilómetros, pero tras los inevitables rodeos andaremos casi el doble.


Comencemos. Nada más salir de la estación, cogiendo Vesterbrogade a la derecha, tenemos a tiro de piedra el Tivoli (1) y Radhuspladsen.


Como ya te conté en la entrada anterior, la Plaza del Ayuntamiento está actualmente en obras. En fin, puede que eso te impida apreciar un poco su amplitud, pero desde luego no la increíble concentración de rincones bonitos que esconde. Por ejemplo:

(Ayuntamiento de Copenhague). 

Como curiosidad te diré que este edificio logró arrancarme la primera de las muchas carcajadas que he soltado durante este viaje. Y es que, quién podría imaginar que, colocado discretamente en uno de los rincones de su patio interior, iba a toparme con un busto de La Pasionaria?


Luego, al acercarte más, ves que no, que la estatua no es de Dolores Ibárruri sino de Hans Christian Andersen. Pero la verdad es que así, vista de lejos, da bastante el pego, ¿no? Precisamente de este escritor hay otra estatua en uno de los laterales del Ayuntamiento.


En el lado opuesto del Ayuntamiento hay una columna rematada con dos músicos tocando el lur, un curioso instrumento de viento que ya era usado en la Edad de Bronce. 


Y, por supuesto, el Hotel Palace, que a mí me recordaba siempre a Florencia. ¿No le ves también tú cierto parecido con el Palazzo Vecchio?

 

Antes de abandonar Radhuspladsen deberías echar un vistazo a la famosa chica del tiempo, situada en la torre del Rishshuset. 


Dicen que cuando hace buen tiempo la chica del tiempo se asoma a la plaza montada en su bicicleta, y que cuando llueve sale con su paraguas. Lo cierto es que este mecanismo de los años treinta lleva roto bastante tiempo. Lo que sí funciona es el enorme termómetro que hay en el mismo edificio, justo abajo. 


Una de las calles que nace en la Plaza del Ayuntamiento es Stroget, tal vez la arteria más conocida de Copenhague. Aquí, además de tiendas a mansalva y garitos de comida rápida, podrás disfrutar de mil artistas callejeros. Como éste, que se gana la vida tocando el Bolero de Rabel con botellas de vino.


Paseando por Stroget podrás descubrir bonitos edificios y plazas. Como Gammeltorv, que alberga el palacio de Justicia o la Fuente de la Caridad. 


Dicen que todos los años, para el cumpleaños de la reina, los daneses cuelgan manzanas doradas de los surtidores. Si te aprieta el hambre, siempre puedes comprar una bandeja de arándanos o moras en alguno de los puestos ambulantes, pero cuidado con esta fruta que parece una extraña variedad de uva. No están malas, pero puede que sus pepitas te acompañen durante el resto del viaje.


Amagertorv es otra plaza, famosa por su fuente de las cigüeñas.



Stroget desemboca en Kongens Nytorv. Al igual que Radhuspladsen está en obras, y aún así es preciosa. Desde allí se divisa Nyhavn (Puerto Nuevo), pero si te parece bien vamos a seguir en línea recta por Bredgade hasta los jardines del Kastellet. Este parque es inmenso y, además del castillo, por nada del mundo deberías perderte el castillo, el molino y la increíble iglesia de St Alban. 


 


Llegado a este punto, y después de mucho andar, por fin tienes a tiro de piedra la estatua de La Sirenita. 


Viendo esta foto tal vez puedas pensar que allí no había nadie en el momento en el que tomé la instantánea, pero lo cierto es que este lugar suele estar siempre muy concurrido. Si no me crees, mira cómo cambia todo cuando ves La Sirenita desde el mar. 


Lo mejor de este lugar, lo educada que es la gente, que no acapara el lugar y se retira en cuanto ha inmortalizado el diminuto monumento en su cámara. Lo mejor de lo mejor, cuando algún gilipollas intenta trepar hasta la misma sirenita para tomarse una foto abrazado a ella, sin tomar conciencia de que:

1)    La Sirenita está en el mar.

2)    Que las piedras sobre las que se sustenta están embadurnadas de verdín.

Dicho esto, imagina cómo son las hostias que, con paciencia, puedes llegar a presenciar allí. Y, sobre todo, la cara que se les queda a los intrépidos cuando, empapados de la cabeza a los pies, emergen a la superficie y sienten las risas de decenas de turistas, mientras sus cámaras inmortalizan el momento.

NOTAS:

(1)  ¿Cutre? ¿Retro? ¿Entrañable? En cualquier caso, recomendable si vas con críos y quieres disfrutar de atracciones como las de antes. Por cierto, los cambiadores de este parque te ofrecen una muestra más del “carácter” nórdico. Apilados junto al cambiador, hay docenas de pañales de todas las tallas, para uso gratuito. ¿Te imaginas lo que durarían esos pañales aquí? No quiero ni pensarlo.